sábado, 22 de octubre de 2011

Da igual

¿Que siempre digo lo mismo? Muy cierto.
Siempre digo que nada importa, que no tiene importancia, o que da igual.
¿Y es así? Lo dudo, pero tengo mis motivos para decirlo, o para sentirlo así. Si lo digo es porque siempre ha dado igual lo que yo diga, lo que yo piense, o lo que yo quiera. Siempre he estado a merced de todos, del mundo, y de cada una de las personas que habitan en él. Y no importaba lo que yo quisiera, lo que yo sintiera, o lo que mi corazón quisiera hacer. Eso no importaba cuando otra persona quería hacer lo contrario, pues eso sería lo que se haría.
Y me cansé.
Hace poco me cansé de todo esto. Me cansé de hacer lo que todo el mundo quiere, me cansé de decir lo que todos quieren escuchar. Me cansé, y se acabó.
¿Y qué pasa? Que todo el mundo se volvió en mi contra.
Ahora todo el mundo vive enfadado conmigo, ya sea por una cosa o por otra. Todo está decayendo en mi vida en cuanto a amigos, relaciones o familia… ¿Y todo por qué? ¿Por ser como realmente soy? ¿Por ser como nunca me dejaron ser?
Es muy triste darte cuenta de que la gente solo te quiere cuando sólo haces lo que ellos quieren, cuando solo les dices lo que ellos quieren escuchar. Es muy triste saber que realmente no te quieren por ser como eres, si no por ser como ellos quieren que seas.
¿Debería volver a ser la niña que todo el mundo usaba para lo que ellos quisieran? Puede ser, pero no lo haré.

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